La vida se me empezó a marchitar tan rápidamente, ya no queda mucho para decir
ya no queda mucho para aclarar. A mí no me tocó una buena vida, muchos a los 15 años
eran felices. Yo a los 19 años sigo esperando que la felicidad toque mi puerta.
Le habrán dado mal la dirección de mi casa?
Quizás sea hora de empezar a despedirme de las cosas
que siempre creí que me hacían bien pero que, al final, me dí cuenta que sólo empeoraban las cosas.
Tendré que dedicarme a volver a empezar mi vida.
Si es que alguna vez tuve una ...
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